Para cambiar de compañía energética tienes que seguir unos pasos. Solo uno de cada tres hogares ha optado alguna vez por cambiar de suministrador de energía. De estos, 8 de cada 10 lo hicieron para abaratar la factura de luz, mientras que 3 de cada 10 cambiaron de proveedor de gas para beneficiarse de una oferta conjunta de gas y electricidad. El primer paso es conocer cuál es tu compañía si es de libre mercado o de mercado regulado. Y no solo es importante sola comercializadora sino la distribuidora. Hay que tener en cuenta que las cinco primera compañía también están en el libre mercado.
Haz un estudio de tu factura, de tu potencia y de tus necesidades. Los grandes descuentos a veces son solo una pequeña publicidad engañosa. Por lo que hay que ver muchos aspectos a tener en cuenta. La potencia contratada, que es la parte fija de la factura, la que pagas aunque no consumas, y que a nivel doméstico suele oscilar entre 3,3 y 5,5 kilovatios-hora. Y después de eso hay que llamar a un agente para de distintas compañías para escuchar ofertas y sobre los mismos puntos hacer comparativa. El suministro de gas natural para pymes es otro punto a tener en cuenta a la hora de ahorrar costes.