El tratamiento del ictus en Sevilla ayuda a los pacientes y a los familiares hacer frente a una serie de dificultades en su vida diaria como consecuencia de las secuelas que haya ocasionado el daño cerebral sufrido. Con el objetivo de minimizar la incidencia de estas limitaciones en las actividades de la vida diaria del paciente, se diseñan este tipo de programas integrales. Esto aborda desde un enfoque mucho más general hasta las limitaciones de cada paciente en particular. Es importante detectar y actuar en los primeros síntomas de un ictus.
No siempre implica que una persona no sea autónoma. El cuidado también se da cuando acompañas a alguien a quien quieres y le proporcionas ayuda mayor o menor en cualquier actividad física, intelectual, social, emocional o espiritual. El cuidado ideal de los afectados por un ictus suele ser el que realiza la propia familia. Es común que los familiares sean los que se encarguen del cuidado; son las personas que mejor conocen al paciente y las que más interés personal van a poner en su recuperación. Muchos de estos pacientes sienten frustración, rabia, miedo e impotencia a la vez que un sentimiento de pena. La rehabilitación de tumor cerebral en Sevilla nos confirma la importancia que tiene los tratamientos a los programas lo más temprano posible.